3 maneras de limpiar la mente
Cerrar las redes sociales no es una opción, pero, ¿qué te parece ver videos para aprender a tener tu cabeza con menos estrés encima? Aquí te chismeo cosas que te pueden servir.
¿No tienes tiempo de leer? Escucha con el botón de arriba 👆🏼
Por la mañana dejé mi termo medio vacío en el escritorio. A las dos horas seguía ahí, pero ya había un termo adicional. En el suelo abandoné mis pantuflas; a mediodía, como no las hallaba, me puse unos zapatos. No tiré el kleenex que usé para limpiar mi nariz. Necesitaba mi libreta. ¿Dónde chingaos había puesto mi pluma azul? ¡Ah! Tenía que hacer el pago del gas. ¿Y… mi cartera?
Si esto se oye parecido a tu inicio de día, chócalas: yo soy naturalmente así.
Con todo, desde hace meses trato de cambiar el flujo de lo que traigo en la cabeza y, por tanto, de mis espacios. O al revés. Construí un sistema para que mi escritorio pueda permanecer limpio por más tiempo y, para mi sorpresa, el tener un fondo sin tantas cosas, impacta en el nivel de productividad que manejo.
Aprovechando que todavía estamos en enero, tengo algunos consejos para lograr esto. En realidad, son más de 3. ¿Pero a poco no se ve cool el título?
Un producto 🔮
En la última carta hablé de cómo organizar mejor tus pestañas abiertas. Pero es un hecho que a veces queremos guardar algún artículo en una biblioteca o necesitamos leerlo después por falta de tiempo. Es más, en ocasiones deseamos leer buenos artículos pero perseguirlos consume horas preciadas.
Pocket es otra extensión de Chrome que uso. Es una especie de caja fuerte de artículos. Los puedes acomodar en un cajón con aquellos que están tan buenos que quieres regresar a ellos y en otro poner los que quieres leer para después (la verdad, puedes hacer cuantas colecciones quieras).
Con lo que me caso de esta extensión es que su selección de artículos es excelente. Ojo, porque normalmente son piezas de medianas a largas, pero valen la pena. No hace mucho leí un recuento buenísimo de lo que ha pasado en Twitter con Elon Musk a través de The Verge y no me habría dado cuenta de su existencia sin Pocket.
Para descubrirla, puedes agregarla a Google Chrome a través de este enlace.
Una serie 🎞
¿Qué dará más miedo? ¿La muerte o llegar a una edad en donde todo es imposible: desde moverse… hasta pensar? The Last Days of Ptolemy Grey es una miniserie que hace que te puedas plantear estas preguntas.
En resumidas cuentas, narra los últimos días en la Tierra de un señor llamado Ptolemy Grey. Si me lo preguntan, Samuel L. Jackson merece todos los aplausos posibles por su actuación. Al principio, lo vemos como un anciano con demencia que tiene miedo hasta de su propia sombra, obsesionado por un solo recuerdo, desorientado, como un niño que no entiende el mundo.
No voy a darte mucho spoiler, pero luego lo vemos como un hombre mayor que tiene carácter y quiere defender a quien se preocupa por él. La actuación de Dominique Fishback, una joven actriz afroamericana, hace que todo sea muy entrañable.
De alguna manera, esta serie habla de que para tener limpieza mental, también hay que tener limpieza en el corazón. La puedes encontrar en Apple TV+.
Un video 🎥
Hay muchos influencers que se dedican a promocionar maneras para adquirir mayor productividad. Sin embargo, normalmente la gente que da estos consejos parece que tiene la energía siempre a tope y entrega su contenido de manera exprés, con prisa.
En cambio, la mujer que quiero recomendar brilla por dar sus recomendaciones de manera pausada y con el cometido de servirnos. Mariana es portuguesa y comparte sus métodos y tips para hacer la vida más productiva con algo de paz.
Habla de cómo estudiar mejor, poner objetivos y da algunas reseñas. Checa sus videos en YouTube a través de este enlace.
Un par de recomendaciones 💡
Hay gente que sigue influencers porque sí (no sé si hay una razón para estar atenta a la vida de las Kardashians, por ejemplo), hay otros influencers que también son artistas, periodistas o que explican cosas.
Yo sigo a una por su escritorio. Maisy Leigh no hace otra cosa más que presumir lo precioso que es su espacio de trabajo. A veces, nos invita a pasarla con ella en lo que diseña. Otras, nos muestra su rutina. Pero todo está enmarcado en una estética acogedora (cozy aesthetic).
Vale la pena revisar su cuenta de Instagram, que está en este enlace, para robarse ideas de su escritorio. ¿Conoces a alguna otra persona que haga contenido así? Respóndeme este correo y cuéntame, porque colecciono influencers extraños.
También en los últimos tiempos, encuentro cierto placer en ordenar, sobre todo, mi escritorio. Es un tiempo que puedo usar para pensar en mí y acomodar cosas. Tal vez suena tonto, pero limpiar la casa puede ser relajante y nos da chance de escuchar la música que queremos o pensar con más calma.
Si quieres saber cómo aprovechar la limpieza, puedes leer este artículo con 10 maneras de practicar algo que han bautizado como “cleanfulness”. Una manera más moderna de cómo aprovechar un trapo para conocerse mejor.
Una minificción ✍🏻
Fui víctima de un secuestro la semana pasada. No me di cuenta. Sólo sé que desperté en un cuarto minúsculo, oscuro y con olor a metal: así era el aroma del vacío. Delante de mí había una computadora: una pantalla, un teclado, un mouse. Nada más.
O eso creía yo.
Desde una esquina alcancé a escuchar: “Escribe 3 métodos para evitar la procrastinación”. Sí, mi cuartucho venía equipado con un sistema de audio de gran calidad.
Alcancé el teclado y empecé a escribir. Primero, necesitaba una introducción. Escribí de cómo el ser humano promedio tenía sólo 4 mil semanas de vida. Parecía mucho en números, así que dibujé una caja e hice copy-paste. Cuando tuve las 4 mil cajas en la pantalla, ya no parecían tantas.
Después hice tres párrafos: en uno hablé de cómo usar el mindfulness para enfocarse en tareas largas, en otro describí cómo hacerse de espacios sin distracciones y, finalmente, en el tercero, recomendé premiarse cuando se lograba alguna tarea.
Listo. Elegí “Enviar”. Traté de respirar profundamente, pero no pude hacerlo, por el sistema de sonido sonó: “Dame posiciones sexuales divertidas”.
Con el mouse dibujé a dos seres humanos teniendo relaciones sexuales de todas las maneras que se me ocurrieron. Elegí las cosas más extrañas. Las que parecían formar animales.
Listo. Elegí “Enviar”. Volví a tomar aire, pero no terminé de hacerlo; por el sistema sonó: “Haz el reporte financiero del archivo que aparecerá en pantalla”.
Y así lo hice.
Mis captores me hicieron trabajar horas sin parar. Hasta que, por un minuto, todo fue silencio.
Por fin tuve algo de paz. Y en ese momento reparé en algo terrible: el cuarto no tenía ventanas ni puertas. Peor. Me di cuenta de que no tenía hambre. De que nadie me había hablado de manera directa. ¡Peor! Yo no tenía cuerpo.
“¡Sáquenme de aquí!”, grité con todas mis fuerzas.
Llegué a la más terrible de las verdades: a las inteligencias artificiales… nadie nos oye.
Una reflexión 💭
Un día, uno de mis mejores amigos hizo esta lista de Spotify llamada “Raspando Chancla”:
Es ideal para limpiar. Cuando vivía sola, la ponía siempre para hacer el aseo de mi departamento.
Conozco pocas personas que disfruten en serio de la limpieza. Pero resulta que hay estudios que revelan que tener un espacio de trabajo y de vivienda limpios hace que de pronto tengamos más huecos para pensar.
No es un misterio que la mente es un reflejo del espacio físico. Pero, ¿qué pasa cuando tenemos la cabeza llena de estupideces? Pues nada: que no ponemos atención.
Si me lo preguntas, ahora anoto más mis tareas y recordatorios, para no tener que pensar todo en todas partes al mismo tiempo (ja, ja, saludos a los Oscares). Tengo una serie de pasos que me permite enfocarme en una tarea a la vez y procuro seguir una rutina. Poquitas cosas que hacen la diferencia.
Lo que deseo para ti este año es que te des espacio para limpiar tu lugar físico y mental con un sistema de poco mantenimiento. Verás que tus tareas se acomodan. Si tienes tu propio método, cuéntame cuál es.
Un meme
¡Nos vemos dentro de dos miércoles! P.D. ¡Gracias por responder la encuesta la última vez! Esta carta llegará a las 9 de la mañana, hora de la Ciudad de México.
¿Es tu primera vez? Te dejo más cartas aquí.
Con cariño libre de virus,
J. McNamara, aka Geeknifer.
Puedes ponerte en contacto conmigo por Instagram, Telegram, Facebook, Twitter y LinkedIn.